Hoy, leyendo El País, me topé con una nota titulada “Raúl Castro pide austeridad y dice que las reformas se aplazan, pero continúan adelante” en la cual se puede leer una frase reveladora y claramente capitalista:
“No nos engañemos más; si no hay presión, si no existe la necesidad de trabajar para satisfacer mis necesidades, y me lo están dando gratis por aquí y por allá, nos quedaremos sin voz llamando al trabajo”.
No hace falta agregar más, pienso que la mentalidad cubana está cambiando y llegará un punto en que la realidad no se pueda tapar con protocolo.
(13/10/09)